viernes, 26 de julio de 2013

Cuando no hay intención de delinquir....

Es curioso como es mucho más fácil si se comete un delito, y podemos ver al delincuente  como alguien cruel, terrible y sin escrúpulos, casi como un demonio con cuernos, y todo. Pero el problema surge cuando hay un accidente con resultado de muerte y la culpa parece recaer sobre una persona normal y corriente, alguien como nosotros, ¿qué podemos pensar entonces? Lo digo teniendo en mente el trágico accidente de tren que sucedió en Santiago de Compostela, el pasado día 24 de julio con un terrible resultado de 78 muertos. Todo parece indicar o más bien todos queremos focalizar la "culpa" en el maquinista del tren. Realmente puede que fuera a demasiada velocidad y este actuar negligente causara la muerte de tantas personas, sin embargo cómo criminalizar esta conducta, o más bien como enfocar el problema de la aplicación de la ley. Se trata de alguien que no quiso matar, que estaba trabajando y que quizá puede que un error o una imprudencia de su parte causó estas terribles consecuencias. Suele decirse que todos somos humanos, pero la envergadura del suceso ha hecho que este señor ahora mismo se encuentre imputado y con todas las miradas puestas en su conducta.
 
Me pongo en la piel de las víctimas y comprendo su necesidad de obtener respuestas y de que nadie vuelva a pasar por lo mismo, para ello es necesario investigar por qué sucedió este terrible accidente y que y/o quienes fueron los responsables. Para esto, la Justicia Restaurativa es una gran aliada, porque proporciona una atención individualizada a las víctimas y trata de tenerlas siempre y en todo momento informadas de la evolución del caso.
 
Sin embargo, me pongo también en la situación del maquinista y su familia, para mí quizá una víctima y verdugo, a la vez, porque todos podemos comprender que siendo una persona normal, con un mínimo de empatía, el saber que sobre su "conciencia"lleva la muerte de tantas personas, debe ser algo tan terrible como insoportable que a buen seguro le marcara de por vida. ¿qué castigo mayor para una persona, que saber que indirectamente has sido el causante de la muerte de tantas personas?
No creo que haya algo más duro que tener esto en la mente día tras día, ningún juicio, ninguna ley humana podrá castigarlo como estoy segura que ya de por si, el mismo lo está haciendo, ni siquiera aunque resultara absuelto y se comprobara que él no tuvo la culpa, podrá olvidarse del accidente y el resultado tan catastrófico. ¿Como ayudar a este hombre y a las víctimas?
Desde luego, que el proceso penal abierto, puede ayudar a aclarar responsabilidades legales, económicas y a intentar que no vuelva a suceder, pero sólo un proceso de justicia restaurativa, respetando tiempos, espacios y momentos, puede ayudar a "curar" las heridas psicológicas de las víctimas y del maquinista. Propiciar un poco de "paz" en sus vidas puede ser algo esencial para su recuperación.
 

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